El director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, ha expresado su creciente preocupación por el mal uso de la inteligencia artificial, advirtiendo que el verdadero peligro no radica en que las máquinas autónomas se vuelvan rebeldes, sino en las personas que utilizan herramientas de IA para causar daños deliberados.
En un episodio reciente del podcast de Theo Von, Altman abordó la largamente debatida cuestión de los riesgos de la IA. En lugar de hacerse eco de los temores distópicos de que las máquinas se vuelvan contra la humanidad, centró la atención en las intenciones humanas. «Me preocupa más que la gente use la IA para hacer cosas malas que que la IA decida hacerlas por sí sola», dijo Altman.
Sus comentarios marcan un alejamiento de la típica narrativa de ciencia ficción sobre robots asesinos y sistemas autoconscientes, y en cambio destacan un desafío más inmediato y realista: el potencial de que actores maliciosos exploten modelos avanzados de IA.
“El riesgo es que alguien realmente quiera causar daño y tenga una herramienta muy poderosa para hacerlo”, señaló, señalando la facilidad con la que los poderosos sistemas de IA podrían convertirse en armas si no se controlan.
Altman reconoció la dificultad de diseñar sistemas de IA que se mantengan seguros y beneficiosos mientras estén en manos de millones de usuarios. «Estamos intentando construir barreras de seguridad sobre la marcha. Es difícil, pero necesario», admitió, destacando los esfuerzos continuos de OpenAI para integrar directrices éticas y salvaguardas técnicas en sus modelos.
Sus comentarios llegan en un momento en que OpenAI se enfrenta a un mayor escrutinio por parte de los responsables políticos y la sociedad civil, en particular ante la creciente especulación en torno al desarrollo de GPT-5. Con la IA generativa cada vez más accesible e influyente en la vida cotidiana, las cuestiones de gobernanza, rendición de cuentas y control son más urgentes que nunca.
Mientras tanto, OpenAI ha comenzado oficialmente el despliegue de su nuevo agente de inteligencia artificial, ChatGPT Agent, tras una semana de retraso. Anunciada originalmente el 18 de julio, la función ya está disponible para todos los suscriptores de ChatGPT Plus, Pro y Team, según un comunicado publicado por la compañía en la red social X.
El retraso en el lanzamiento dejó a muchos usuarios desconcertados, y algunos aún reportan la ausencia de la función a pesar de que OpenAI afirma haberla implementado por completo. La compañía no ha revelado la causa del retraso, y las preguntas planteadas en la sección de comentarios de la publicación siguen sin respuesta.