KIEV — Las protestas están creciendo en toda Ucrania contra una nueva ley que pondría a los organismos anticorrupción bajo control gubernamental, incluso mientras el presidente Volodymyr Zelenskyy ofreció un nuevo proyecto de ley vago para aliviar las preocupaciones de los manifestantes.
Miles de personas se manifestaron en Kiev, Lviv, Dnipro y Odesa, e incluso en la ciudad de primera línea de Járkov, cerca de la frontera rusa, un día después de que Zelenskyy firmara el proyecto de ley original que, según los críticos, socavaba la independencia de la Oficina Nacional Anticorrupción (NABU) y la Fiscalía Especial Anticorrupción (SAP).
Tras un día de presión por parte de los ciudadanos ucranianos, la Comisión Europea y muchos gobiernos europeos, Zelenskyy dijo que “escuchó la opinión pública” y prometió arreglar la situación con un nuevo proyecto de ley que, según prometió, preservaría la independencia de los investigadores anticorrupción.
“Hemos escuchado lo que la gente dice estos días, lo que se dice en redes sociales, entre ellos, en la calle. Todo esto no es en vano. Hemos analizado todas las preocupaciones, todos los aspectos de lo que debe cambiarse”, declaró Zelenski en un discurso por video el miércoles por la noche, mientras los manifestantes coreaban consignas en las calles frente a su oficina.
Zelenskyy dijo que después de un día de conversaciones con las partes afectadas, pronto propondrá un proyecto de ley al parlamento ucraniano que será “una respuesta a la situación y fortalecerá el sistema de aplicación de la ley”.
“Se cumplirán todas las normas para la independencia de las instituciones anticorrupción”, afirmó Zelenski.
“Este será un proyecto de ley presidencial y lo implementaremos en el marco de nuestra estrategia para transformar el Estado”, agregó Zelenskyy, proporcionando pocos detalles y sin fecha límite para el nuevo proyecto de ley.
La NABU y el SAP apoyaron el giro de Zelenskyy y dijeron que están listos para unirse a la discusión y preparación de una solución legislativa que eliminará los riesgos legales, cumplirá con los estándares del estado de derecho y brindará un mayor potencial para garantizar la justicia en Ucrania.
Pero la repentina concesión de Zelensky no calmó las calles, ya que los manifestantes exigieron ver primero la ley.
“Hasta que veamos el texto, es difícil evaluarlo, o incluso si sucederá. ¡No hay fe en Zelenski! Tenemos que seguir presionando”, declaró el veterano de guerra ucraniano Oleh Symoroz en redes sociales .