Ali Akbar Velayati, asesor principal del líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, reconoció que los ejercicios militares anteriores de Irán cerca de sus fronteras noroccidentales tenían como objetivo deliberadamente contrarrestar la iniciativa propuesta del “Corredor Zangezur”.
En declaraciones a los medios locales, Velayati afirmó que los ejercicios militares sirvieron como un claro mensaje de disuasión. «Esos ejercicios militares no fueron casuales. Fueron una maniobra estratégica para señalar la oposición de Irán al proyecto del llamado Corredor Zangezur», declaró.
El corredor propuesto, que prevé conectar Azerbaiyán con su enclave de Najicheván a través de la provincia armenia de Syunik, al sur del país, ha generado alarma en Teherán. Las autoridades iraníes han advertido reiteradamente que cualquier alteración de las fronteras regionales o las rutas de tránsito sin su participación sería inaceptable.
Velayati subrayó que Irán ha adoptado una política de “prevención activa” en lugar de un enfoque pasivo o reactivo. “Para nosotros, se trata de una cuestión de seguridad nacional. La República Islámica de Irán no se queda de brazos cruzados cuando sus fronteras e influencia regional están en juego. Nuestra doctrina estratégica se basa en la participación activa para prevenir acontecimientos indeseables”, añadió.
Los comentarios de Velayati se producen en medio de renovadas tensiones por los proyectos de transporte regional, mientras que la competencia geopolítica y las iniciativas de infraestructura están remodelando el panorama posterior al conflicto del Cáucaso Sur.