El Inter Miami empató 0-0 con el FC Cincinnati sin el suspendido Lionel Messi el sábado por la noche.
Messi no estuvo disponible tras la suspensión de un partido de la Major League Soccer (MLS) contra su compañero Jordi Alba por no asistir al Juego de las Estrellas. Messi estuvo presente el sábado, viéndolo desde una suite en el Chase Stadium.
El copropietario del Inter Miami, Jorge Mas, calificó el castigo de “draconiano” el viernes y dijo que Messi estaba “extremadamente molesto” por la suspensión que lo dejó fuera de un partido importante mientras Miami busca su segundo MLS Supporters’ Shield consecutivo.
El entrenador de Miami, Javier Mascherano, cuestionó si la liga todavía habría suspendido a Messi si el Inter Miami hubiera jugado un partido de visitante.
“Para llenar estadios y vender entradas, nadie se queja”, dijo Mascherano a través de un intérprete el sábado, y agregó que el equipo le había informado a la MLS que Messi estaba lidiando con la fatiga debido al congestionado calendario de Miami.
“Es extraño”, dijo Mascherano, “un día dicen una cosa y al siguiente otra. Todos oímos lo que se dijo: que era comprensible la cantidad de partidos que había jugado”.
Miami y Cincinnati llegaron al partido como ganadores de seis de sus últimos siete encuentros. Cincinnati, que goleó 3-0 a Messi y al Inter Miami el miércoles pasado, ocupa el segundo lugar en la clasificación del Supporters’ Shield con 49 puntos, mientras que el Inter Miami es quinto con 42.
El defensor de Cincinnati, Miles Robinson, casi anotó el gol de la victoria a un par de minutos del tiempo añadido el sábado cuando cabeceó el tiro libre del candidato a MVP Evander, pero el gol fue anulado debido a una falta.
El veterano delantero Luis Suárez realizó varios pases increíbles en los primeros minutos, incluido uno a Fafà Picault, cuyo cabezazo fue negado por el portero de Cincinnati, Roman Celentano.
Antes del partido, Miami presentó al mediocampista argentino Rodrigo De Paul, buen amigo de Messi y compañero de selección, quien firmó oficialmente con el club el viernes. La afición del Chase Stadium vitoreó y ondeó carteles de bienvenida cuando la nueva estrella de Miami entró al campo .