Argentina se recupera económicamente, pero crece oposición a Milei

— Un informe de JP Morgan apunta a una recuperación “profunda y sorprendente” de la economía argentina bajo la presidencia de Javier Milei, pero advierte que el futuro de su plan económico dependerá del resultado de las elecciones legislativas de octubre.

Desde que asumió el cargo en diciembre de 2023, Milei ha implementado medidas radicales para reducir el Estado, recortar el gasto y liberalizar la economía.

Según la división de banca de inversión e investigación del gigante financiero estadounidense, Argentina ha logrado en apenas unos meses bajar la inflación, alcanzar el equilibrio fiscal y fortalecer sus reservas internacionales, luego de años de estancamiento, crisis y fuerte dependencia del gasto público.

“El país está viviendo una transformación estructural con un potencial extraordinario, aunque no sin riesgos importantes”, escribieron los economistas Diego Pereira y Lucila Barbeito en el informe.

La inflación mensual descendió al 1,6% en junio, frente a más del 25% en diciembre. El gobierno ha registrado un superávit primario equivalente al 1,1% del PIB en lo que va de año, y las reservas del Banco Central están comenzando a recuperarse.

Moody’s mejoró la calificación crediticia de Argentina por segunda vez en 2025, y JP Morgan proyectó un crecimiento del PIB para 2025 del 5,5%.

Sin embargo, el ajuste económico ha tenido un costo social significativo. El gobierno ha despedido a empleados públicos, recortado subsidios y suspendido proyectos de infraestructura estatal. A pesar de las mejoras en los indicadores macroeconómicos, las condiciones sociales siguen siendo frágiles.

Una encuesta reciente de Zuban Córdoba reveló que el 52,8% de los votantes planea castigar al gobierno en las elecciones de octubre, mientras que el 38,3% pretende premiarlo. La encuesta también reveló que el 57,5% de los argentinos tiene una opinión negativa de Milei.

Según la encuestadora Analogías, la opinión favorable al gobierno disminuyó entre 2 y 3 puntos porcentuales en julio. El índice de aprobación de Milei bajó 4 puntos, hasta el 44%, mientras que su desaprobación subió al 50%, creando una brecha negativa neta de 5,5 puntos, según informó Perfil el miércoles.

Los encuestados criticaron el tono y el estilo de comunicación de Milei: el 73% dijo estar en desacuerdo con ello y el 66% lo calificó de “violento”.

Analistas y bancos coinciden en que sin apoyo político en el Congreso, el rumbo económico del gobierno podría debilitarse.

La economista Milagros Gismondi escribió en X que muchas empresas están comenzando a centrarse en aumentar la productividad, lo que ella ve como un cambio positivo.

“Los bancos han vuelto a ser bancos, y los concesionarios de automóviles están pensando en cómo producir de forma más eficiente. Eso no ocurría antes, porque todos estaban preocupados por si podrían importar, si habría energía o si el dólar se dispararía”, dijo.

Aun así, Gismondi señaló que el sector privado se mantiene cauteloso. “También están esperando las elecciones para ver si avanzan reformas más profundas, como cambios laborales o tributarios. Si la estabilización se mantiene, el año que viene deberíamos por fin empezar a hablar seriamente sobre cómo mejorar la productividad de Argentina”, afirmó.

Si Milei no logra un buen desempeño en las elecciones de octubre, podría enfrentar dificultades para aprobar leyes clave, incluidas reformas políticas, privatizaciones o posibles cambios constitucionales.

El presidente gobierna actualmente con un Congreso fragmentado, y la votación legislativa podría reforzar esa dinámica o debilitar aún más su bloque si su partido, La Libertad Avanza, no logra conservar o ampliar sus escaños.