Esqueleto en selva guatemalteca, probablemente de observador de aves estadounidense desaparecido desde 2023

Se cree que los restos humanos encontrados cerca de un sitio arqueológico en la selva guatemalteca son los de un observador de aves estadounidense que fue reportado como desaparecido hace casi dos años y medio, dijeron funcionarios locales.

En el mismo lugar donde se descubrieron los huesos humanos fueron hallados una camisa lila, sandalias y pantalones cortos iguales a los que vestía Raymond Vincent Ashcroft el día de su desaparición, informó Carlos Soza, de la Procuraduría General de la República.

Ashcroft, de 66 años, formó parte de un grupo de observación de aves que visitó la antigua ciudad maya de Tikal, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en febrero de 2023.

En el momento de su desaparición, su esposa dijo que el señor Ashcroft había decidido regresar al hotel pero nunca había llegado.

Ella se había quedado con el grupo, tomando fotografías, y denunció su desaparición tan pronto como se dio cuenta de que no había llegado a su habitación de hotel en el Parque Nacional Tikal, informaron medios locales en ese momento.

Se enviaron rápidamente equipos de búsqueda, apenas media hora después de que Ashcroft se separara de su grupo, pero no encontraron rastro del turista desaparecido.

Se trajeron perros rastreadores para buscar en la densa vegetación del parque nacional, pero fue en vano.

Semanas después de su desaparición, Interpol emitió una alerta amarilla pero hasta esta semana no hubo informes de avistamientos ni se encontraron rastros de sus pertenencias.

Los residentes de un pueblo cercano encontraron huesos humanos y ropa que coincidía con la que vestía Ashcroft en la jungla a 14 kilómetros del sitio arqueológico, dijo Soza a una estación de radio local.

Según el funcionario de la Procuraduría para la Atención de Delitos contra Turistas Extranjeros de Guatemala, los restos se encontraban entre una densa vegetación y sólo se podía llegar a ellos a pie.

Agregó que una prueba de ADN determinaría si los restos eran los de Ashcroft.

En el vasto parque nacional han desaparecido turistas en el pasado y desde entonces.

En 2022, un hombre alemán de 53 años se separó de su grupo y murió por insolación.

Y en 2023, una familia francesa fue encontrada deshidratada pero a salvo después de estar perdida durante dos días.