EDIMBURGO, Escocia (AP) — Azotadas por vientos fríos y con vistas a las agitadas y grises aguas del Mar del Norte, las impresionantes dunas de arena de la costa noreste de Escocia se encuentran entre los lugares favoritos de Donald Trump en el mundo.
“En algún momento, tal vez en mi vejez, iré allí y haré la cosa más hermosa que jamás hayas visto”, dijo Trump en 2023, durante su juicio por fraude civil en Nueva York , hablando de sus planes para futuros desarrollos en su propiedad en Balmedie, Aberdeenshire.
A sus 79 años y de nuevo en la Casa Blanca, Trump está haciendo realidad al menos parte de esa promesa: viajará a Escocia el viernes mientras el negocio de su familia se prepara para la inauguración el 13 de agosto de un nuevo campo que promociona como “los 36 hoyos más grandiosos del golf”.
“Estamos en un punto en el que la administración Trump está tan entrelazada con los asuntos de Trump que no parece ver mucha diferencia”, dijo Jordan Libowitz, vicepresidente de la organización de vigilancia ética Ciudadanos por la Responsabilidad y la Ética en Washington. “Es como si la Casa Blanca fuera casi una rama de la Organización Trump”.
Durante su primer mandato, la Organización Trump firmó un pacto ético que prohíbe los acuerdos con empresas extranjeras. Un marco ético para su segundo mandato lo permite.
Los activos de Trump se encuentran en un fideicomiso administrado por sus hijos, quienes también gestionan las operaciones diarias de la Organización Trump mientras él ocupa la Casa Blanca. La compañía ha firmado recientemente numerosos y lucrativos acuerdos internacionales relacionados con campos de golf, incluyendo planes para construir complejos de lujo en Catar y Vietnam , mientras el gobierno negocia aranceles para esos países y en todo el mundo.
El primer campo de Trump en Aberdeen ha provocado batallas legales
Mientras tanto, el actual campo de golf de Trump en Aberdeenshire tiene una historia casi tan rocosa como los acantilados de la zona.
Ha tenido dificultades para obtener beneficios y las autoridades escocesas de conservación descubrieron que había destruido parcialmente las dunas de arena cercanas. La empresa de Trump también recibió la orden de cubrir los costes legales del gobierno escocés después de que el campo de golf presentara una demanda sin éxito por la construcción de un parque eólico cercano , argumentando en parte que perjudicaba la opinión de los golfistas.
Y el desarrollo fue parte de un caso civil masivo, que acusó a Trump de inflar su riqueza para asegurar préstamos y hacer negocios.