“Estoy totalmente de acuerdo”: Alina Habba fue nombrada fiscal federal interina en Nueva Jersey; el Departamento de Justicia anuló la decisión de los jueces federales.

Alina Habba fue designada fiscal federal interina de Nueva Jersey, un día antes de que su mandato como fiscal federal interina expirara el viernes.

Habba anunció a través de redes sociales que permanecería al mando. El anuncio se produce tras la decisión de la administración Trump de retirar su nominación para el cargo permanente, un tecnicismo legal que ahora le permite ejercer como fiscal federal interina hasta 210 días más.

Un portavoz del Departamento de Justicia confirmó la medida, mientras que la Casa Blanca reiteró el pleno respaldo del presidente Trump a Habba. “El presidente Trump mantiene su plena confianza en Alina Habba y en su compromiso de servir al pueblo de Nueva Jersey”, declaró el portavoz de la Casa Blanca, Harrison Fields.

La decisión pone fin a un tenso enfrentamiento entre funcionarios de Washington y jueces federales de Nueva Jersey, que había generado confusión en la oficina sobre quién estaba legalmente a cargo. A principios de esta semana, los jueces habían seleccionado a su propia candidata, la experimentada fiscal federal Desiree Leigh Grace. Sin embargo, poco después, el Departamento de Justicia despidió a Grace, acusando a los jueces de actuar políticamente y reafirmando su apoyo a Habba.

Grace, muy respetada en el Departamento de Justicia, había expresado su disposición a servir, calificándola de “mayor honor” haber sido elegida por méritos. Sin embargo, la declaración de Habba al día siguiente dejó pocas dudas sobre quién dirigiría el cargo.

“No me acobardo ante la presión. No respondo a la política. Esta es una lucha por la justicia. Y estoy totalmente comprometido”, escribió Habba el jueves.

Continuó con un mensaje al personal: “Ha habido suficiente ruido en los últimos cuatro meses”.

“Mantengamos la concentración y volvamos al importante trabajo que tiene por delante el Distrito de Nueva Jersey”, citó Habba al New York Times.

Habba, exabogada personal de Donald Trump, carece de experiencia previa como fiscal. Desde que asumió el cargo en marzo, ha atraído la atención nacional por iniciar investigaciones contra destacados demócratas y declarar su ambición de contribuir a “independizar a Nueva Jersey”, una postura que ha generado controversia dado el carácter tradicionalmente imparcial del cargo.

En otro giro, un portavoz del Departamento de Justicia confirmó que Habba renunció brevemente el jueves a su cargo interino y fue reclasificado como primer asistente, un puesto que anteriormente pertenecía a Grace, a quien la propia Habba había designado como adjunta a principios de este año.

Grace, republicana y la primera de su familia en asistir a la universidad, se forjó un nombre como fiscal federal que luchaba contra la violencia de pandillas. Su trabajo, incluyendo importantes condenas contra la MS-13, le valió reconocimiento en el Departamento de Justicia. Colegas en el ámbito legal, como Robert Scrivo, elogiaron su dedicación y eficacia. “No conozco a nadie que lo haya hecho a un nivel superior”, declaró Scrivo, según el New York Times.

A pesar de los acontecimientos recientes, Habba había reconocido públicamente las contribuciones de Grace, diciendo a sus colegas en mayo que nombrarla adjunta había sido la mejor decisión de su mandato, un comentario recibido con aplausos.