Uno de los principales diplomáticos climáticos del mundo instó al gobierno federal a comprometerse con un ambicioso objetivo para 2035 de reducir las emisiones de carbono, diciendo que Australia puede obtener recompensas económicas “colosales” si adopta la energía limpia.
Está previsto que el gobierno federal revele su objetivo para 2035 en septiembre de este año, mientras que la Coalición continúa consumida por un furioso debate interno sobre si debe mantener su compromiso de cero emisiones netas para 2050.
La Autoridad de Cambio Climático está preparando un asesoramiento sobre un objetivo para 2035 de entre el 65 y el 75 por ciento, que servirá de base para el objetivo que el gobierno presentará a la agencia climática de la ONU.
El secretario ejecutivo de la ONU para el cambio climático, Simon Stiell, que preside la agencia responsable de gestionar el Acuerdo de París para limitar el calentamiento global, visita Sídney y Canberra esta semana mientras presiona a los países de todo el mundo para que incrementen sus ambiciones climáticas.
El Sr. Stiell calificó el nuevo objetivo climático como un “momento decisivo” para Australia y dijo que el gobierno tenía “una oportunidad de construir un plan que proteja a los trabajadores y las empresas australianas preparándolos para una economía global que cambia rápidamente”.
En un discurso ante un grupo de inversores y representantes de energías limpias en Sídney, advirtió que un “cambio climático sin control” sería una “bola de demolición económica” para la economía australiana y mundial, y que era imperativo tomar medidas.
Stiell dijo que los desastres climáticos “ya están costando a los propietarios de viviendas australianos 4.000 millones de dólares al año” y que el cambio climático sin control “paralizará la producción de alimentos de Australia” y drenará billones del PIB nacional para 2050.
“Usted sabe que las medidas a medias destruirán propiedades e infraestructuras, golpearán a los hogares, llevarán a la quiebra a las regiones y harán agujeros en los presupuestos públicos”, dijo.
“Y ustedes saben que la acción real abre la puerta a un liderazgo real y a grandes recompensas para este país ambicioso y capaz”.
Stiell insta a resolver “rápidamente” el estancamiento de la COP31
La visita de Stiell se produce mientras Australia continúa su intento de albergar la próxima gran conferencia climática de la ONU en Adelaida el año que viene, compitiendo por el evento con Turquía.
El diplomático de la ONU dijo que la fecha límite para determinar el próximo anfitrión ya había pasado varios meses y que, como faltaban menos de 18 meses para el evento, era imperativo resolver el asunto.
“Lo único que puedo decir es que es necesario tomar una decisión, y debe tomarse con urgencia. Los dos proponentes deben ponerse de acuerdo para tomarla. Y la demora en esa decisión perjudica el proceso”, declaró el Sr. Stiell.
Agregó que hace apenas unos días estuvo en Turquía, donde dio el mismo mensaje.
Junto a Stiell, el presidente de la Autoridad de Cambio Climático (CCA), Matt Kean, dijo que lo que está en juego “no podría ser más alto” para Australia, pero que la búsqueda de emisiones netas cero también presenta una oportunidad para la nación rica en sol y minerales.