Médicos Sin Fronteras (MSF) ha informado que al menos 652 niños murieron de desnutrición en el estado de Katsina, Nigeria, durante la primera mitad de 2025. La crisis, dice la organización, está impulsada por importantes recortes de financiación de los principales donantes internacionales, incluidos Estados Unidos, el Reino Unido y la UE.
MSF informó que cerca de 70.000 niños con desnutrición recibieron atención médica este año, y casi 10.000 se encuentran hospitalizados en estado grave. El número de niños que padecen la forma más grave de desnutrición ha aumentado un 208% en comparación con el mismo período del año pasado, según informa News.Az , citando a Al Jazeera .
La situación se ve agravada por la inseguridad y la violencia en el norte de Nigeria, donde grupos armados y bandidajes han desplazado a familias y perturbado la agricultura. Los brotes de enfermedades, la baja cobertura de vacunación y el acceso deficiente a los servicios básicos de salud agravan la crisis.
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU también anunció que suspenderá la ayuda alimentaria y nutricional a 1,3 millones de personas en el noreste de Nigeria para finales de julio debido a la escasez de fondos. Esto podría dejar a cientos de miles de niños en riesgo de desnutrición severa.
A pesar de estas advertencias, el gobierno de Nigeria ha asignado 200 mil millones de nairas (130 millones de dólares) para ayudar a abordar la brecha de financiamiento, luego de una fuerte disminución en la ayuda extranjera bajo la administración Trump y de otros donantes occidentales.